Andrés Amorós, elegido como 'mantenedor' o 'laureado del modernismo' de la Feria ha inaugurado este evento cragado de simbología y cultura del Art Nouveau que se disfrutará en León desde este viernes hasta el domingo con más de 60 actividades programadas.

Vestidos para la ocasión, en el tren turístico de León y con campanas que entonaban el himno de León, han llegado los encargados de dar vida a la II Feria Modernista de León. Dando paso al viaje que experimentará la ciudad al siglo XIX y principios del siglo XX, cuando el Modernismo se apoderaba de León. En aquella época cobraba vida la Casa Botines de Antonio Gaudí uno de los máximos representantes de este movimiento en España.
Así pues, la capital se traslada al pasado para vivir un fin de semana historicó y cultural que hará las delicias de los leoneses y de todos aquellos que decidan pasear por los alrededores de la obra de Gaudí en León. Un evento que según ha destacado José María Viejo, director general de la Fundación Obra Social de Castilla y León (FUNDOS) se realiza con el objetivo de "contribuir a la dinamización cultural, turistica y comercial de la comunidad inmediata de la que forma parte el Museo Casa Botines de Gaudí".

Raúl Fernández Sobrino, director del Museo Casa Botines Gaudí, ha dado las gracias a todas las entidades que participan en esta II Feria Modernista de León y tras repasar el calendario de actividades que se llevarán a cabo durante el fin de semana daba paso al 'mantenedor' de esta feria, Andrés Amorós que ha sido escogido por su conocimiento sobre el Modernismo.
El 'laureado del modernismo', ha dado el discurso de inauguración de la Feria en el que ha destacado la importancia de este movimiento en la vida pasada y en la actual. Apostando por los valores modernistas aplicados a la vida cotidiana de hoy Amorós a subrayado que este movimiento se caracteriza por englobar todo lo que le rodea, uniendo en un mismo espacio todas las variantes del arte.

Amorós ha rememorado el año 1892 cuando Gaudí comenzó a trabajar sobre la Casa Botines, además, en ese mismo año Rubén Dario, uno de los exponentes modernistas de la literatura hispana llegaba a España para presentar este movimiento literario. Adelantandose por primera vez un escritor iberoamericano a los escritores españoles en la exploración de un nuevo movimiento artístico, literario y cultural.
"El modernismo es algo muy amplio, estético, literario y de todas las clases pues influye en toda la vida. Decía Gaudí 'todo sale del gran libro de la naturaleza, pero todo lo que acontece es solamente un símbolo'. Un simbolismo del que el Modernismo subraya muchisimo su importancia, pues las cosas no son solo lo que parecen o lo que retrata una máquina sino que el hombre se pasea sobre un bosque de simbolos", comentó Andrés Amorós.
El 'mantenedor' también ha sido muy claro en la importancia que tiene este movimiento en León, pues para él "encontrarlo en esta ciudad es muy fácil, pues uno de los elementos importantes del Modernismo es la luz. Importante en la Catedral, importante en el Museo de Arte Contemporaneo y tan importante en la Casa Botines".

"El modernismo alcanzó a todo, es un gran movimiento de entusiamo y libertad hacia la belleza. Eso no pasa de moda, el Modernismo significaba en su momento romper reglas, se oponía al realismo pero no a lo anterior o a lo clásico. Se opone a lo viejo, a lo caduco, a lo manido, a lo aburrido, pero nunca se opone a los clásicos. En definitiva ha pasado de moda el Modernismo como escuela completa de unos años, no ha pasado de ninguna manera a la libertad artística", resaltaba Amorós.
"En León es muy fácil entenderlo, pero el arte nos agrada pero además nos da compañía y consuelo", concluyó Amorós antes de cortar la cinta con la que se daba por inaugurada oficialmente la II Feria Modernista de León.
