Una multitudinaria manifestación recorrió las calles de León al grito de 'Respeto', congregando a cerca de un millar de personas, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno y la Policía Local. La protesta, impulsada por CCOO, PSOE, Sumar, IU, Podemos, Intersindical y Cavecal junto a otras 25 organizaciones, alzó la voz contra la gestión de los incendios del pasado verano por parte de la Junta de Castilla y León, exigiendo responsabilidades y un cambio de rumbo en las políticas forestales.
La marcha, que partió desde la emblemática plaza de San Marcos, estuvo jalonada de banderas, pancartas y consignas reivindicativas. Al frente de la movilización se situaron los líderes de las organizaciones convocantes, entre ellos Carlos Martínez, secretario general del PSOECyL, quien no dudó en expresar su malestar por la “falta de alma, la falta de compromiso y la falta de medios de un Gobierno absolutamente sordo ante las demandas que estamos planteando todos en cada uno de los territorios de esta Comunidad”.

Críticas a la gestión y exigencia de respeto
Acompañado por Nuria Rubio, vicesecretaria general, y Daniel de la Rosa, secretario de Organización, el candidato a la Presidencia de la Junta demandó “al señor Quiñones y al señor Mañueco respeto”. En un tono enérgico, afirmó que “el respeto no es negociable, no se mendiga, no se ruega, es un derecho que tenemos inherente y hoy estamos aquí para exigir respeto por nuestra Comunidad autónoma, para todos los territorios que lamentablemente han sido asolados por los incendios durante este verano y es la exigencia de la sociedad a la Junta; lo que no ha tenido”.
Los manifestantes no escatimaron en críticas hacia el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, a quienes exigieron su dimisión al grito de consignas como 'Menos toreros y más bomberos', 'Ecocidio por omisión', 'Los incendios se apagan en invierno' o 'El Bierzo se quema y Quiñones lo celebra'.

Petición de dimisión del consejero
Juan Gascón, coordinador de Izquierda Unida en Castilla y León, se sumó a la petición de dimisión del consejero, calificando su gestión de los incendios como “desastrosa”. Gascón defendió la necesidad de “poner la prioridad en la gente y en los montes por encima de la prioridad de las empresas que están llevándose suculentos beneficios de la Comunidad”, al tiempo que reclamó “que se cuiden en invierno los montes de Castilla y León”.
En la misma línea, Miguel Ángel Llamas, coordinador de Podemos Castilla y León, denunció como “una falta de respeto que el Gobierno de Mañueco se retrasase más de 11 años en aprobar el Plan de Protección Civil ante Emergencias por Incendios Forestales en Castilla y León, Infocal, y que eso dejase a Castilla y León indefensa para hacer frente a los incendios y es una falta de respeto que no haya asumido responsabilidades políticas el señor Suárez-Quiñones”. Llamas recordó que “desde Podemos Castilla León esperamos aún que la Fiscalía dé respuesta a la denuncia que presentamos”, y abogó por un operativo de prevención y extinción de incendios cien por cien público, sin externalizaciones.

Demandas de políticas públicas y fin de la explotación
Ana Fernández de los Muros, secretaria General de Comisiones Obreras de Castilla y León, hizo hincapié en la necesidad de políticas públicas “suficientes” y denunció que lo sucedido este verano ha puesto de manifiesto “las carencias en las zonas rurales de Castilla y León y es imprescindible que haya un operativo público de prevención y extinción de incendios que sea capaz de controlar la emergencia climática”.
Mariana Echevarría, del Movimiento Sumar en Castilla y León, fue contundente al afirmar que “después de 38 años de políticas ambientales que conciben nuestra tierra como un territorio de explotación, con un consejero que antes de largarse está firmando licencias de macrogranjas, de plantas de biogás, sin estudio de los acuíferos ni de los tratamientos de los residuos, demandamos la dimisión del consejero Suárez-Quiñones y abogamos por un cambio en la forma de gobierno y de concebir cómo se tiene que gestionar nuestra tierra”, añadiendo que “esta región merece una oportunidad distinta”.
Cristina Fulconi, portavoz de la Intersindical de Castilla y León, extendió la demanda de respeto a los servicios públicos, denunciando “todo lo sucedido durante este verano con los incendios, todo lo sucedido a lo largo de todo este trimestre, la falta de previsión de lo que se nos venía encima con las lluvias. Estamos viendo cómo las aguas se van contaminando con todo lodazal que está llegando”. Fulconi lamentó que la Junta “no tiene respeto por los servicios públicos y están dejando una mayor despoblación”, señalando que “solamente en la provincia de León falta un tercio de los funcionarios y que se tienen que dedicar a todo lo que la gente necesita”.
Recuerdo a las víctimas del accidente minero
En un gesto de solidaridad, todas las organizaciones convocantes recordaron el reciente accidente minero en Asturias, en el que fallecieron dos trabajadores, uno de ellos vecino de la localidad lacianiega de Caboalles de Abajo. Los asistentes a la manifestación guardaron un minuto de silencio en su memoria frente a la catedral, donde concluyó la marcha, que transcurrió sin incidentes.
Reivindicaciones finales
La movilización culminó con la lectura de un manifiesto que resume las principales reivindicaciones: el cese del consejero, un operativo de incendios público durante todo el año, un plan de empleo verde para los pueblos, la reapertura de consultorios médicos, un plan de vivienda rural y ayudas suficientes para quienes perdieron su medio de vida o propiedades durante los incendios de este verano y de años pasados.
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