Agentes de la Policía Local de León han tenido que intervenir en dos incidentes distintos en la ciudad, generando inquietud entre los residentes.
En primer lugar, en la Calle Colón, los agentes respondieron a una alerta sobre daños en una obra. Al llegar al lugar, identificaron a dos hombres que admitieron haber causado desperfectos al romper un saco de cemento blanco o yeso, esparciendo su contenido en la vía pública. Este acto afectó a tres vehículos estacionados en las inmediaciones. Los agentes levantaron los correspondientes boletines de denuncia por infracción a la Ordenanza de Protección de la Convivencia, dado que la acción perjudicó directamente a los mencionados vehículos. Además, se planificó una segunda inspección para detectar posibles daños adicionales no visibles en ese momento.
Por otra parte, en respuesta a la denuncia de un vecino de la calle Obispo Álvarez Miranda, la Policía Local intervino en un establecimiento hostelero. El residente se quejaba del excesivo volumen de la música, provocando molestias. Al llegar al lugar, los agentes constataron que el local emitía música a un volumen muy alto, una actividad que no estaba autorizada según la licencia del establecimiento. Como resultado, se ordenó la retirada inmediata de la música y se formuló una denuncia por incumplimiento de las condiciones establecidas en dicha licencia.