47 templos de la provincia de León se beneficiarán del plan ‘Iglesia Abierta’ de la Diputación

Un total de 47 templos repartidos por todas las comarcas, serán objeto de obras de reparación y rehabilitación gracias al plan ‘Iglesia Abierta’,puesto en marcha por el Instituto Leonés de Cultura de la Diputación de León y los obispados de León y Astorga

12 de Enero de 2024
Actualizado: 12 de Enero de 2024 a las 13:29
Ermita de Ntra Sra. de Guadalupe en Villar del Monte

Un total de 47 templos repartidos por todas las comarcas, 22 de ellos en la Diócesis de Astorga y 25 en la de León, serán objeto de obras de reparación y rehabilitación gracias al plan ‘Iglesia Abierta’, puesto en marcha por el Instituto Leonés de Cultura de la Diputación de León en colaboración con ambos obispados y que cuenta con un millón de euros de presupuesto.

Los trabajos se centrarán en la mejora de las cubiertas y estructuras de edificios religiosos que se encuentran en malas condiciones, pero también en la restauración de bienes muebles del patrimonio eclesiástico, especialmente retablos.

Para ello, cada una de las diócesis ha aportado 250.000 euros al ILC, que se sumaron a los 500.000 destinados por la institución provincial, aunque el volumen económico que finalmente se pondrá al servicio del patrimonio será mayor, dado que las administraciones locales han de colaborar con un mínimo del diez por ciento del coste total de las obras.

El plan bienal ‘Iglesia Abierta’ incluía varias novedades destacables. De este modo, son las diócesis las que trasladan fondos a la Diputación para que desde esta entidad se gestionen directamente en conexión con las juntas vecinales y con los ayuntamientos. Además, la selección de los templos se ha llevado a cabo mediante criterios técnicos y objetivos a cargo de una comisión mixta de valoración y seguimiento formada por personal especializado del ILC y de ambas Diócesis, cuyos miembros valoraron tanto el estado de cada edificio como la importancia y antigüedad del bien en cuestión, así como la calidad de las memorias presentadas.

Por último, los templos beneficiados con este programa deberán abrir sus puertas para usos culturales y sociales que resulten beneficiosos y sean de interés para los vecinos de cada localidad, en las condiciones que establece la normativa diocesana y siempre que ello sea compatible con el uso religioso.