Los artilleros del MACA de Ferral del Bernesga (León) conmemoran la gesta del Dos de Mayo de 1808

El patio de armas de la base militar Conde de Gazola, en la localidad leonesa de Ferral del Bernesga, acogió hoy el acto de homenaje de los artilleros del Mando de Artillería de Campaña a los capitanes Luis Daoiz y Pedro Velarde, protagonistas del primer hecho de armas de la Guerra de la Independencia durante la defensa del Parque de Monteleón en Madrid el 2 de mayo de 1808.

El acto estuvo presidido por el general jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, Amador Enseñat y Berea, y a él acudieron diferentes autoridades civiles y militares, entre los que se encontraron el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, o el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones. Además, en el transcurso del mismo se impusieron condecoraciones a los militares acreedores de reconocimiento durante este año.

El día 2 de mayo de 1808, la ciudadanía de Madrid se encontró concentrada y agitada ante el inminente traslado de la familia real y la imposición en el trono de un príncipe extranjero. Ante la resistencia popular, el general Murat abrió fuego de artillería contra la muchedumbre y provocó multitud de bajas. El pueblo, consciente de la necesidad de armarse, se dirigió hacia el Parque de Artillería, donde estos dos oficiales del Arma de Artillería retomaron la posesión de la plaza y organizaron su defensa ante los efectivos de la División Westfalia del general Lefranc.

El capitán Velarde se encargó de la defensa interior, mientras que el capitán Daoiz se ocupó del mando de todas las fuerzas ubicando partidas mixtas de militares y ciudadanos en edificios cercanos. Él mismo permaneció durante la totalidad del combate al descubierto, junto a las piezas de artillería en la calle.

Después de causar numerosas bajas entre las tropas francesas, ambos oficiales fallecieron junto con los ciudadanos que dirigieron. El capitán Daoiz fue herido de muerte por las bayonetas de los granaderos de la escolta del general Lefranc, mientas el capitán Velarde murió de un disparo en el corazón. Sus restos descansan en el monumento a los caídos por España en Madrid.

Con motivo del traslado del Museo del Ejército a Toledo, en el año 2009 el conjunto funerario formado por túmulos y urnas con los restos textiles de los dos capitanes fue enviado al Patronato del Alcázar de Segovia. Una vez finalizada la exposición con motivo de su 250 aniversario, los restos fueron cedidos como fondo de depósito al Maca y desde el 2015 se encuentran expuestos de manera permanente en la sala histórica de la base Conde de Gazola.

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