Tras cuatro décadas deleitando a leoneses con sus pizzas, pastas y postres caseros, la emblemática Pizzería Ragazzi ha cerrado sus puertas. Ubicada en la Calle Joaquina de Vedruna, número 13, desde 1985, el local se convirtió en un punto de encuentro familiar y un referente gastronómico para la ciudad.
La jubilación de los hermanos Carlos y Goyo, los dueños del establecimiento, ha sido el motivo del cierre. Tras 40 años al mando del negocio, han decidido dar un paso al lado y disfrutar de un merecido descanso. La noticia del cierre, anunciada el pasado martes 23 de julio, ha causado sorpresa y tristeza entre los vecinos y clientes habituales.
Ragazzi no solo era una pizzería, era una institución en León. Con más de 1.745 reseñas en Google y una puntuación de 4,5 estrellas, el local era reconocido por sus pizzas, lasañas , así como por su delicioso tiramisú. Era un lugar donde las familias se reunían para celebrar ocasiones especiales, los amigos compartían risas y los estudiantes disfrutaban de una comida reconfortante.
Para muchos leoneses, Ragazzi era más que un restaurante, era parte de su historia. Ubicado en la zona de La Inmaculada, el local era conocido por todos y formaba parte del paisaje urbano de la ciudad. Su cierre marca el fin de una era para la comunidad local, que despide con cariño a un establecimiento que ha dejado una huella imborrable en la memoria gastronómica de León.
Sin duda, Ragazzi deja un gran vacío en la ciudad. Su legado, sin embargo, permanecerá vivo en los recuerdos de todos aquellos que tuvieron la oportunidad de disfrutar de su deliciosa comida y ambiente familiar.
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