La empresa Reolum, responsable del proyecto La Robla Green, que levantará una planta de biomasa y otra de metanol verde en la localidad de La Robla (León), realizó esta semana una demostración a los agricultores de sus sistema de recogida de restos de la cosecha de maíz con el objetivo de animarles a aportar este material a la planta de biomasa.
La demostración se realizó el miércoles, 20 de marzo, en Fresno de la Vega, donde los agricultores pudieron comprobar que se trata de un sistema efectivo e inocuo para sus tierras. Para ello se usó una hileradora Kuhn y una empacadora Massey-Ferguson, que recogieron 6,8 toneladas de restos de maíz por hectárea.
“Las máquinas recolectaron un 60 por ciento de la paja presente en el suelo. El 40 por ciento restante, que se corresponde a la fracción de paja más fina, es conveniente dejarlo en el propio terreno porque sirve para mantener los niveles de materia orgánica en el suelo”, explica la compañía en nota de prensa. “Además, este remanente facilita las labores de siembra que pudieran hacerse a continuación”, añade.

Eliminar es paja gruesa conlleva también ingresos para el agricultor, ahorro de costes y un terreno más preparado para la siembra. También tiene beneficios medioambientales ya que reduce las aportaciones de nitrógeno necesarias para la mineralización de la paja y el uso de agroquímicos para combatir la araña roja y el gusano gris. La paja recolectada se utilizará para la producción de energía y combustible verde en una economía circular que permite dar valor medioambiental al cultivo del maíz. Esta dinámica es susceptible de contemplarse en las medidas de la Política Agraria Común como impacto positivo medioambiental del cultivo.
“Con esta demostración los agricultores han podido comprobar en primera persona el funcionamiento de la maquinaria necesaria para recoger la paja de maíz que nosotros utilizaremos en La Robla Green, al tiempo que se dan cuenta de los beneficios que supone esta forma de aprovechar un resto que no solo no tiene uso actualmente, sino que puede llegar a evitar problemas agronómicos en el cultivo", explica el presidente de Reolum, Fernando Muñoz.
Esta demostración supone un paso más para la futura planta de biomasa, que integrará La Robla Green y está formada por dos instalaciones punteras que trabajan sinérgicamente, que son ‘Roblum’, la primera planta de generación de energía verde con balance negativo en CO2 que ha conseguido a partir de la combustión de biomasa de restos agrícolas; y La ‘Robla Nueva Energía’, la mayor planta de e-metanol verde de Europa en cuyas instalaciones el CO2 extraído de la planta de biomasa se mezcla con el hidrógeno verde producido mediante electrólisis del agua, a través de energía eléctrica renovable, para dar lugar al e-metanol verde, un producto neutro en emisiones de CO2, no contaminante del agua y que se mantiene en estado líquido a temperatura ambiente.