Los pacientes de Castilla y León tuvieron que esperar una media de 116 días para ser operados en 2023, siete menos que el año anterior y 28 menos que en 2019, según datos publicados hoy por la Consejería de Sanidad y recogidos por Ical. Si se compara el dato con el del tercer trimestre del año, se observa que la lista se ha mantenido en esos 116 días.
En cuanto a la provincia de León, el Hospital de León registra actualmente 6,145 pacientes en lista de espera, con un tiempo estimado de espera hasta la operación de 134 días. Por otro lado, en el Hospital del Bierzo, se contabilizan 2,984 pacientes en lista de espera, con un tiempo de espera hasta la operación de 143 días. Estos datos reflejan la situación de la carga asistencial en ambos hospitales, destacando las diferencias en el volumen de pacientes y los plazos de espera.
Por lo que respecta a los pacientes en espera estructural para una cirugía, el dato se cerró con una caída del 6,2 por ciento sobre el dato de 2022, al pasar de los 33.967 registrados hace un año, a los 31.856 pacientes al acabar 2023. Todo, teniendo en cuenta que el número de entradas en lista de espera fue un siete por ciento más que en 2022 (9.616 pacientes), en un año en el que se realizaron aproximadamente 143.000 cirugías programadas en el quirófano, sin contar intervenciones urgentes ni actividad fuera de quirófano.
Por especialidades, las que tienen menos pacientes en espera son Cirugía Torácica (63), Cirugía Cardiaca (84) y Dermatología (109), esta última con la demora media más baja de todas, situada en 25 días; mientras que las que acumulan más esperas son Traumatología (10.893 pacientes), Cirugía General y de Aparato Digestivo (5.903) y Oftalmología (4.434 pacientes en espera).
Por diagnósticos, los cuatro procesos con mayor número de pacientes en espera de intervención a 31 de diciembre de 2023 fueron los siguientes: cataratas (3.400), hernia inguinal (1.656), artrosis de rodilla (1.563) y deformaciones adquiridas de los dedos (1.411 pacientes). Los 15 procesos más frecuentes -entre los que se encuentran por ejemplo las venas varicosas, la artrosis de cadera o las lesiones de hombro- supusieron el 48,36 por ciento del total de pacientes pendientes de entrar en el quirófano.
Por prioridad
En cuanto al criterio de prioridad para ser intervenido, la totalidad de los 817 pacientes registrados en el nivel 1, es decir, con indicación de ser operados antes de 30 días dada su patología, estaba a final del año pasado dentro del rango y con una demora media de once días. En la dos, (máximo idóneo de 90 días para pasar por quirófano) había un total de 5.367 pacientes, con una demora media de 116 días, de forma que 3.124, el 58,2 por ciento, fueron intervenidos en menos de tres meses.
En la tercera prioridad, (plazo hasta 180 días, los casos menos urgentes) se registraron 25.672 pacientes, con una demora media de 120 días. No obstante, 19.476 no rebasaron los seis meses, lo que supone el 75,86 por ciento del total.
Consultas y pruebas
En cuanto a los datos referidos a demoras para una consulta externa hospitalaria en los centros de Sacyl, el balance anual de 2023 indica que la espera media estructural se situó en 89 días, frente a los 95 de 2022, con nueve hospitales por debajo de esa cifra. El global de pacientes en espera estructural para una primera consulta externa asciende a 192.747, por debajo de los 211.862 de 2022. Esto supone 19.115 menos, lo que representa una reducción del nueve por ciento.
Respecto a la demora media estructural de las pruebas diagnósticas se alcanzan los 64 días para un TAC (75 el tercer trimestre de 2022), 73 para una resonancia magnética (92 el tercer trimestre de 2022), 104 para una ecografía (113 el tercer trimestre de 2022) y 85 para una mamografía (116 el tercer trimestre de 2022). Por lo que se refiere al número de pacientes, en el caso de un TAC suman 3.024; 2.757 para una resonancia magnética; 10.887 para una ecografía; y 681 pendientes de una mamografía.