La Guardia Civil de León reforzó sus operaciones en respuesta a las dos alertas emitidas debido a los temporales de viento y lluvia conocidos como Ciarán y Domingos, que impactaron en la provincia la semana pasada. Durante este período, se intensificaron los servicios destinados a atender cualquier incidente que pudiera requerir la intervención de las patrullas operativas de la Guardia Civil.
La atención se centró en situaciones como la caída de ramas y árboles en las carreteras, accidentes de tráfico, deslizamientos de tierra, monitoreo de los niveles de río en áreas aisladas y, en general, cualquier eventualidad que requiriera la presencia de las autoridades. Afortunadamente, ninguna de las numerosas llamadas recibidas en el número de emergencia 062 de la Guardia Civil resultó ser de gravedad.
Entre las acciones más destacadas en las carreteras se encuentra la regulación del tráfico en la carretera LE-3714, de LE-3707 a Valbuena de Roblo, en el municipio de Crémenes, el 2 de noviembre debido al cierre completo de la vía provocado por la caída de un árbol debido al viento. Además, se produjo el cierre total de la carretera LE-6505, de Matalobos del Páramo a Grisuela del Páramo, el 4 de noviembre también debido a la caída de un árbol.
El domingo pasado, la Guardia Civil se desplazó hasta la localidad de Lusio en Oencia, donde un deslizamiento de tierra afectó a seis casas, aunque afortunadamente no se encontraba ninguna persona en su interior. Por precaución, se evacuó a un vecino que vivía cerca de las viviendas afectadas por temor a nuevos deslizamientos.
Estos servicios, que involucraron a efectivos de Seguridad Ciudadana y de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de León, se llevaron a cabo en estrecha coordinación con otras entidades públicas.
La Guardia Civil recomienda a la población que descargue la aplicación ALERTCOPS, que permite ponerse en contacto con los Centros Operativos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en caso de emergencia. La aplicación proporciona alertas en tiempo real cuando el usuario se encuentra en una zona afectada por incidentes.